“Ser campeón fue el resultado de muchos años de trabajo, entrenamiento, disciplina y dedicación absoluta. Mantener una conducta fue la mejor estrategia para cumplir mis objetivos. Alcancé mi mejor rendimiento”, reveló el púgil que llegó al puesto número 14 en el ranking elaborado por la Organización Mundial de Boxeo (OMB) por obtener la corona latina de la mencionada entidad.

“Llegué a estar entre los mejores del mundo. Algo increíble porque me aproximó a la posibilidad de competir al máximo nivel. Decidí afrontar ese desafío y me esfuerzo a diario por tener esa chance como representante de Florencio Varela: el lugar donde nací, me crié e incluso elegí para vivir”, afirmó Leal.  

El deportista varelense inició su preparación a los siete años motivado por su padre. La devoción por subir al cuadrilátero era su principal estímulo. Debutó de manera amateur a los dieciséis. Con veintitrés, combatió de manera profesional por primera vez. Hasta el momento, conquistó catorce peleas con cuatro nocauts y solo perdió en una oportunidad.

Tras la reunión con la máxima autoridad distrital, el atleta describió: “Me recibió muy bien y me brindó todo su apoyo. Un respaldo enorme en mi carrera. Estoy muy feliz”. Además, consideró “fundamental la ayuda del Estado para sostener una rutina de ejercicio exigente a tiempo completo requerida por las competiciones profesionales”.

La consagración

Durante la última fecha organizada por la Federación Argentina de Boxeo (FAB), Leal logró imponerse a Nicolás Andino por puntos tras el combate en el Micro-estadio “Antonio Rotili” perteneciente al Club Atlético Lanús donde las tarjetas de los jueces lo decretaron vencedor el sábado 2 de Octubre.

De ese modo, retuvo el cetro nacional que obtuvo el 23 de enero sobre Alfredo Blanco en fallo unánime. Llegaba de doblegar a Diego Chaves, en decisión mayoritaria, para conservar el título latino OMB.